Una mesa desequilibrada llora y llora toda la mañana. El saco azul está moribundo, solo y frío en el cajón de los saludos. El jarrón de vidrio no se rompe y tampoco tiene sed. La alfombra se siente humillada, hace tiempo que vive recostada. Mis ventanas reciben tazas de asas recalentadas, son consejos ilimitados que merecen ser considerados =)
Mientras tanto, alguien toca insistentemente la puerta, ésta siempre impaciente y desatenta. En la entrada hay un vecina muerta con un golpe en la cabeza. ¿Rebelión en la granja?. Rebelión en mi casa.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home