Así no se quiere.
Pero entonces ¿cómo?. Yo no sé si sé querer, menos amar, pero todos tenemos sentimientos y necesitamos expresarlos. No creo que exista un manual de instrucciones, sino sería todo demasiado monótono: tomar de la mano, dar un abrazo, cuestión de cariño...
Entonces se debería actuar en total libertad, no?; pero bien sabemos que NADIE es 'libre'. Todos respondemos a padrones estipulados por máquinas tragamonedas; manipuladores de deseos e impulsos naturales. Fijador de cabello 'Moralina', siempre de moda, ideal para lucir espléndida en cualquier circunstancia. Y resulta que el por qué de tanto planteo es insignificante cuando las propias actitudes corroboran la antinomia de los cuerpos inertes. O más que 'cuerpos', 'sentidos'... devastados por la hipocresía o la desazón de vivir. Quisiera salirme de todo este palabrerío y poder exponer mis ideas de una manera original, casi vanguardista, y por un momento sentir que mis ambiciones son realmente valoradas. Pero no, sigo escribiendo inútilmente mientras pienso en lo cobarde que soy y somos, en lo frustrante del rechazo y el amor propio escondido entre los más remotos pasajes internos. Curso intensivo para demostrar afecto, junto a su inscripción le garantizamos un novio ejemplo por el lapso de dos (2) meses. Vacantes limitadas.